En el mes de los niños, pequeños trejenses dan la nota
Son alumnos de cuarto grado de la escuela de jornada completa “Ricardo Gutiérrez”, donde llevan adelante un proyecto de inclusión e integración que comparten con personas con discapacidad y también con los abuelos del geriátrico del pueblo.
Obispo Trejo es una de las últimas localidades que se sumó a la propuesta de los Canteros Solidarios en Altura impulsada por el ing. Fernando Rivoira de La Para y de la que ya forman parte casi una decena de pueblos del territorio cordobés.
La escuela local “Ricardo Gutiérrez” trabaja en una huerta escolar que les brinda la posibilidad a los estudiantes de desarrollar y articular un sinfín de contenidos de las áreas curriculares, según lo comenta Mirta Chávez, directora de la institución.
La escuela es de jornada completa, pasando los niños ocho horas diarias en la institución educativa.
“Este proyecto nos dio la posibilidad de pensar la huerta como un aula abierta en la que todos podamos acceder”, afirma la maestra de cuarto grado, Jeni Sánchez, que es quien organizó el proyecto que fue aceptado por la dirección y apoyado por el Municipio a través de la intendente Silbia Mansilla.
Unidos en la Huerta, el proyecto escolar
Unidos en la Huerta se llamó la iniciativa que buscaba el trabajo conjunto de los alumnos, docentes y familias, “con la intención de fomentar la adquisición de valores que motiven el interés y el cuidado por el medio ambiente”.
La huerta se ubica en un patio que no es utilizado por el resto de los estudiantes ya que cada grado tiene asignado un espacio para la recreación.
La directora destaca el trabajo conjunto y cooperativo que permite desarrollar la huerta, además de la articulación con otros contenidos curriculares y emocionales, lo que da la posibilidad de pensarla como un aula abierta.
“A los chicos les gusta salir, investigar, experimentar en otros lugares que no sea solamente el aula”, asegura la directora, destacando los múltiples beneficios que comenzaron a verse reflejados en los alumnos.
Huerta en altura para facilitar la inclusión e integración
Al mismo tiempo destaca la integración e inclusión de alumnos con discapacidad, para lo cual -y a través de la gestión de la mandataria local- invitaron al ingeniero agrónomo Fernando Rivoira quien impulsa el proyecto Canteros en Altura, quien les informó del mismo con el objetivo de poder sumar a todos los chicos.
Así fue como salieron a buscar tarimas para hacer los canteros, en donde trabajan todos los alumnos. Además, el ingeniero hizo la donación de 30 mil pesos para que desde la escuela se pudiera replicar la iniciativa a otros lugares.
Los alumnos decidieron hacer uno en el geriátrico del Hospital y otro en La Casita, espacio de contención para niños con discapacidad. La intendente destacó la iniciativa de los niños que llevaron el proyecto a otras instituciones del pueblo, sumando a los abuelos y también a personas con discapacidad.
“Soy testigo de cómo disfrutaron tanto los chicos como los abuelos, realizando esta experiencia”, indicó Mirta, orgullosa por el trabajo que los niños vienen desarrollando.